Una vez terminado el encuentro que significó la eliminación de Cruz Azul del torneo Apertura en México, los hinchas de este equipo, donde milita el ecuatoriano Joao Rojas, invadieron el campo de juego con la idea de agredir a los jugadores, causando varios disturbios.
El enojo de los fanáticos se desbordó una vez el árbitro diera el pitazo final, violando los sistemas de seguridad y encaminándose a los camerinos del equipo de Cruz Azul, que tuvo que ser resguardado inmediatamente para evitar agresiones.
Ante la imposibilidad de su intento de agresión, los hinchas se encaminaron al lugar donde se encontraba la barra del equipo contrario, Toluca, increpándolos de mala manera e intentando agredirlos.