Una noticia podría dar un giro radical en el futuro de los jugadores ecuatorianos Narciso Mina y Michael Arroyo, quienes hace semanas vieron como descendía su equipo, Atlante, el mismo que podría tener una nueva oportunidad para continuar en la máxima categoría del fútbol mexicano.
La razón de esta esperanza radica en la dura situación que vive uno de los equipos de la Primera División de México, el Gallos Blancos de Querétaro, que se quedaría sin apoyo económico, lo que podría originar una desafiliación del fútbol profesional, teniendo que ocupar alguien su puesto.
Ante esto, las primeras reacciones de los dirigentes del fútbol mexicano radican en que se juegue una especie de Promoción entre el perdedor de la categoría, Atlante, y el segundo puesto del Torneo de Ascenso, para cubrir la plaza dejada por Querétaro.
Por el momento, se espera la decisión de la junta directiva de Querétaro para ver si continúan en el fútbol profesional o se desafilian, lo que abriría la puerta de esperanza para un Atlante que, por el momento, está descendido en el fútbol mexicano.