Durante el partido entre la Roma y el Cagliari, se observó una escena muy emotiva, cuando el jugador Alessandro Florenzi marcó un gol y se metió a las gradas para celebrarlo con un ser especial.
La Roma ya ganaba por la mínima diferencia, y al minuto 12 Florenzi sentenció temprano la victoria de su equipo. Tras anotar, el jugador acudió a las gradas, donde estaba su abuela presenciando el encuentro.