Tomás Boy no podía pasar desapercibido. El técnico rojinegro fue centro de atención en cada uno de los tres goles que convirtió su equipo, en la victoria de esta noche sobre León.
El «Jefe» le puso su toque. A cada uno de los gritos, Boy dejó su asiento en la banca del cuadro local y se puso a bailar.
En primera instancia, parecía que bailaba una mezcla entre norteño y banda, pero en el tercero, ya parecía que bailaba reggaeton.
El Auxiliar Técnico de Boy, José de Jesús Aceves, justificó la reacción del estratega.
«Es como cualquiera, podemos festejar como queramos, no está faltando al respeto, sólo es un festejo, un momento en el que la adrenalina te gana, no hay nada malo», explicó el «Güero».
Por cierto, el entrenador del Atlas no fue reportado en la cédula (no fue amonestado y no recibirá sanción) por el árbitro del encuentro, Fernando Guerrero.
Fuente: Medio Tiempo