Jaime Ayoví es uno de los jugadores con más jerarquía en el actual plantel de Godoy Cruz. Sin embargo, el delantero de la selección ecuatoriana de fútbol, hace dos meses que no juega.
La razón es sencilla: la Yoya se lesionó, y la recuperación demoró más de lo que él y los dirigentes del Expreso esperaban.
Mientras Ayoví se ocupaba de su extraña lesión, en el Tomba las cosas cambiaban. Daniel Oldrá le dejaba su lugar a Gabriel Heinze, y nacía una nueva era.
El delantero confirmó que el viernes le dieron el alta y que podría jugar perfectamente ante Banfield. Sin embargo, los dirigentes ya usaron el artículo 225 para poder contar con los servicios de Leandro Fernández, que aún tiene que cumplir una fecha de suspensión.
«No tengo conocimiento de lo que hacen los dirigentes, hoy por hoy estoy entrenando a la par de mis compañeros», declaró Ayoví en Ovación 90, desconociendo esta situación.
«Estoy prácticamente recuperado. El viernes me dieron el alta, ahora sólo depende de entrenarse bien y que el técnico así me vea», aseguró.
«No hay nada que no cierra. El alta médica me la dieron, no pude hacer la práctica de fútbol por precaución. Mi relación con Heinze es normal a la de todos los compañeros», siguió insistiendo el ecuatoriano.
Pero una vez que entendió la postura del club, la conversación dio un giro: «Si llega el día sábado y no juego, y viene la otra fecha y no juego, recién pensaría que no me tienen en cuenta, por ahora me tengo que entrenar para estar totalmente recuperado», afirmó.
«Seguiré entrenando para recuperarme, acepto lo del artículo de buena manera porque recién me dan el alta, lo entendería. Si empezando la próxima semana lo volvieran a utilizar, se complicaría la cosa», concluyó el delantero del Tomba.
Fuente: Diario Uno de Mendoza
