La modesta selección de San Marino encontró una razón para celebrar en las eliminatorias a la Euro 2016, pese a la derrota ante Lituania.
Catorce años habían pasado desde que San Marino no anotaba un gol de visitante, y lo consiguió en este encuentro, empatando momentáneamente el partido.
Matteo Vitaioli, a los 55 minutos, rompía esta mala racha para San Marino, que festejó a rabiar el gol, como pocas veces se ve.