En el fútbol de Brasil se dio una de las expulsiones más curiosas, la misma que fue acompañada por una reacción así mismo de peculiar por el llanto del jugador, que no creía la forma en la que se fue del campo de juego con la tarjeta roja.
El jugador del Santos de Brasil, Lucas Lima, quiso aprovechar que su equipo empataba de visitante sobre el Internacional de Porto Alegre y se dedicó a quemar tiempo, sin saber que el árbitro de este encuentro iba a ser implacable para juzgar este tipo de sanciones.
Fue así como el jugador vio la tarjeta roja por doble amarilla, ambas por quemar tiempo en el campo de juego, una de las expulsiones que pocas veces se ven pero que son sancionadas dentro de los reglamentos del juego.
Pero lo más curioso, además de la forma en la que se fue expulsado Lucas Lima, fue la reacción del jugador, quien en vez de reclamar salió del campo de juego muy acongojado y terminó a las lágrimas por este hecho.