Un hecho curioso provocó el blooper que cometiera el guardameta argentino Matías Degra en el fútbol de Grecia lo que llevó a que el presidente de su equipo, el Larissa, terminara agrediéndolo y despidiéndolo por este error.
El portero recibió un balón de parte de un compañero en la entrada de su área e intentó salir de lujo, dejando a un rival con una gambeta pero fallando en una segunda y provocando el gol del equipo contrario, lo que no gustó al presidente de este club.
Una vez finalizado el partido, el guardameta fue esperado por el presidente de su equipo, Alexis Kougian, quien lo agredió física y verbalmente y terminó despidiéndolo de este club, todo por este error.
Lo peor para el argentino es que este encuentro marcaba su debut en este club, por lo que no pudo tener peor forma de hacerlo, regresándose a su país tras la confirmación de su salida.