Franck Ribéry no quiso infiltrarse en la espalda para superar la lumbalgia que finalmente lo apartó del Mundial de Brasil 2014, según informó hoy el diario «Le Parisien». «Le tiene miedo a las inyecciones», dijo el médico de la Selección, Franck Le Gall, en declaraciones a «Le Parisien».
El mediocampista de 31 años sufría una inflamación de un disco intervertebral, situado en la parte inferior de la columna vertebral y el equipo médico de la selección le propuso infiltrarse. La idea de inyectarse un producto en la zona afectada nunca fue una posibilidad para el futbolista.
Según el médico de la selección francesa, el centrocampista «pertenece a un club en el que el modo de tratar todas las patologías son las inyecciones», dijo en referencia a los servicios médicos que dirige el célebre Müller Wohlfahrt en el Bayern de Múnich.
«Llega un momento en el que ya no puede más con las inyecciones», agregó el doctor francés para explicar la baja del que estaba llamado a ser la referencia de Francia en el último Mundial de su carrera.
Fuente: TN