Stephane Ruffier, guardameta del Saint-Etienne, cometió un tremendo error que le costó el primer gol en contra para su equipo, en el duelo que terminaron perdiendo por cinco goles ante el PSG.
En una salida del cuadro Saint-Etienne, la presión de los jugadores del PSG obligó a un defensa lanzar un pase hacia atrás para su portero, éste intentó parar el balón con el botín, pero se le escapó y terminó ingresando al arco.