«Las finales generalmente se juegan 51% con el corazón y 49% con el razonamiento», con esa frase inició el estratega de Barcelona la conferencia de prensa luego de la primer final, donde lograron un agónico empate ante Emelec.
«Si hay algo que destacar es las ganas de los jugadores de Barcelona y no bajar los brazos durante todo el partido. Hoy mi equipo supo tener el temple y corazón para mantenernos vivos en esta final», agregó.
Respecto al nivel del equipo ‘Torero’ en este partido, Rubén Israel dijo: «Estuvimos erráticos en varias líneas, especialmente cuando nosotros conseguíamos el balón. La mayor parte de ataques del rival fueron de balones que recogieron tras malos pases de nosotros. En el segundo tiempo los cambios dieron otra dinámica de fútbol».
«Nosotros apostamos mucho al juego aéreo porque tenemos jugadores para ellos. Para nosotros esto es un partido de 190 minutos, y recién terminó el primer tiempo y vamos 1 a 1. No nos cambia el partido jugar de local o visitante», acotó.
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