El fútbol no solo es un espectáculo sino es la forma de unir pueblos y voluntades para grandes propósitos, lo que quedó demostrado en el encuentro que por octavos de final de la Copa Libertadores, jugará Independiente del Valle ante River Plate.
El equipo de Sangolquí, en un gran gesto de solidaridad, anunció una vez sucedido el terremoto que afectó mayoritariamente a Manabí que donaría la taquilla de su encuentro de esta fase para los damnificados por este fenómeno natural.
El destino pondría al frente a River Plate, actual campeón de la Copa Libertadores, gran rival de por su historia y grandeza en estas lides, que le daba un atractivo especial a este encuentro.
Pero, más allá del espectáculo de fútbol, el pueblo ecuatoriano se unió en este acto solidario y, dejando a lado camisetas, colores y aficiones, se juntaron en el estadio Atahualpa de Quito con la linda excusa de ayudar a sus compatriotas más necesitados en este momento.
Así, los corazones ecuatorianos juntaron en total una gran taquilla, que sumó 221.397 dólares, cantidad de dinero que Independiente del Valle destinará para ayudar a los damnificados del terremoto.
Si el resultado con victoria 2-0 ante River Plate para Independiente fue positiva, la unión ecuatoriana para ayudar a los más necesitados fue una goleada humana a las adversidades.