En una tarde gris para Emelec, el equipo ‘eléctrico’ no logró superar a Delfín y sufrió una derrota de 0-1 en el estadio George Capwell, en el marco de la cuarta fecha de la segunda etapa de la Liga Pro.
Esta derrota no solo profundiza la crisis deportiva que el equipo atraviesa, sino que también acerca la sombra del descenso, ya que Emelec se encuentra en una situación delicada en la tabla acumulada.
La falta de ideas y la poca voluntad del equipo azul quedaron en evidencia durante el encuentro. A pesar de contar con jugadores clave como Christian Valencia y Joseph Espinoza, quienes fueron llamados a generar juego, Emelec no logró conectar con sus delanteros Jaime Ayoví y Bryan Angulo.
El gol de Delfín llegó en la segunda mitad, a los 47 minutos, cuando Facundo Castelli cabeceó un centro de Brian Oyola, ligeramente desviado por un elemento azul, y concretó el 1-0 para los de Manabí.
A pesar de los intentos de reacción por parte del equipo eléctrico, la falta de eficacia en ataque y debilidades en defensa limitaron sus posibilidades de cambio en el marcador.
Emelec, en grave peligro de descenso
La preocupación aumenta en Emelec, ya que la situación se torna cada vez más crítica. La diferencia de gol es lo único que separa al equipo azul del descenso, compartiendo acumuladamente la misma cantidad de puntos (17) con Libertad y Guayaquil City.
El equipo ha mostrado una falta de consistencia tanto en marca como en ataque, lo que agrava su situación en la tabla y genera inquietud entre sus seguidores.
La diferencia de gol ha sido el único factor que mantiene a Emelec fuera de los puestos de descenso, pero esta situación es insostenible en el largo plazo. La falta de juego fluido y la dificultad para crear oportunidades de gol son aspectos que deben ser abordados por el cuerpo técnico y jugadores para revertir la situación.
La sombra del descenso empieza a acechar a Emelec, y el equipo deberá trabajar arduamente para encontrar soluciones que le permitan salir de esta crisis deportiva y del peligro inminente de descender.