Un cierre ideal tuvo el cuadro ‘Millonario’ antes de la para por el Mundial, afianzándose en el liderato con un gran triunfo ante su rival de siempre, en el partido ‘Inmortal’, en el Clásico del Astillero, donde Barcelona sucumbió por culpa de sus errores, tanto polémico del verdugo de los ‘Toreros’, Denis Stracqualursi y un buen gol de Ángel Mena.
Emelec, confiado con su público y su buen rendimiento, salió a ahogar a un Barcelona defensivo, que cumplía con su papel en la tabla de posiciones y sufría para tratar de alejar el balón de su área.
Pese a este dominio, quien tendría la primera oportunidad de adelantarse en el marcador serían los ‘Toreros’. Cristian Penilla, en uno de los pocos ataques de los visitantes, estrellaba el balón en el palo y silenciaba por un momento al estadio Capwell.
El dominio de Emelec, que se comenzó a diluir con el paso de los minutos, iba a tener su resultado, por mérito ajeno más que propio, tras un grosero error de Máximo Banguera, que no pudo atajar un balón fácil y dejó servido el balón para que Denis Stracqualursi empujara el balón, con algo de suspenso, y cierto toque de polémica por la posible mano para empujar el balón al fondo de las redes.
Este tanto fue un duro golpe para Barcelona, que no logró recuperarse, pese a realizar cambios en el segundo tiempo, y aunque supo complicar por momentos al guardameta Esteban Dreer, no hizo méritos para empatar, sufriendo cada vez que los locales atacaban.
Para liquidar el encuentro, Ángel Mena en el minuto 85, definió en solitario en un rápido contragolpe, anotando el segundo tanto que terminó por sentenciar la historia del Clásico del Astillero.
Emelec sumó una victoria anímica importante, y la calma de irse a la para del Mundial con el liderato en solitario con 37 puntos, dejando a Barcelona en el quinto lugar con 25 unidades.
