Se jugaban 70 minutos del partido entre El Nacional y Universidad Católica, cuando el árbitro sancionó un penal a favor de los ‘Camaratas’.
El cobro lo hizo Federico Laurito y el balón lo atajó Adrian Bone, pero el juez decretó que se repitiera el penal por invasión de área. Esto provocó el malestar en los hinchas de El Nacional, que empezaron a reclamar desde las gradas, y desencadenó en un enfrentamiento con los policías.
Laurito cobró nuevamente el penal, y Bone de nuevo atajó. Pero el disgusto siguió en los hinchas ‘Militares’, que vieron caer nuevamente a su equipo, que se ubica en el último lugar.