Un gol salvador de Origi sobre el final del partido salvó a Bélgica y al espectáculo en un partido de pobre nivel que terminó con la victoria de los belgas sobre Rusia que los pone a punto de la clasificación a la siguiente etapa.
Bélgica, que había venido de una victoria ante Argelia, sigue sin encontrar el fútbol que lo tuvo como protagonista en las Eliminatorias en Europa, mientras que Rusia, que empató en el primer encuentro ante Corea del Sur, repitió la «fórmula del sueño» en este encuentro.
De mediocampo, el ritmo del partido nunca despegó, y apenas con esporádicas llegadas de lado y lado, parecía todo condenado a terminar en un empate sin goles.
Cuando el partido se aproximaba al final, Origi, tras un centro atrás, remataba con derecha y enviaba el balón al fondo de las redes para poner a celebrar a Bélgica, que es líder de su grupo con seis puntos y espera un empujoncito para estar en octavos de final.