El entrenador de Bélgica, Marc Wilmots, habló duramente tras la derrota de su selección ante Argentina, afirmando que la ‘Albiceleste’ ganó pero no fue más, y que tiene un equipo que no es cosa de otro mundo.
Wilmots no se quejó del arbitraje, pero si de la «maña» de los argentinos, que, según él, aplicaron para quemar tiempo y congelar el partido.
«Es difícil saber porque perdimos, pero una de las razones fue la la experiencia de los argentinos. Son capaces para distorsionar el ritmo del partido y entonces tardan 30 segundos en un saque de banda pero el árbitro no dice nada», dijo.
Sobre su selección, afirmó sentirse «muy orgulloso» de la lucha y entrega que mostraron, destacando que aprendieron mucho para el futuro.