Las ausencias de Damián Díaz y Ariel Nahuelpan fueron muy notorias en un Barcelona sin peso ofensivo que comenzó la segunda etapa con un empate sin goles en condición de local ante el equipo más débil de la primera parte del torneo, Macará.
Pese a tener el dominio desde el inicio del partido, Barcelona no contó con la fuerza ofensiva para inquietar el arco de José Camacho, que no pasó mayores apuros, siendo poco aporte el delantero Carlos Quintero, por lo que los principales ataques se generaban con intentos de remates de media distancia.
Por su parte, como respuesta Macará supo llegar con peligro en los pies de Sergio Mina, que antes de la media hora de juego pudo llegar al tanto de la apertura del marcador, pero definió con poca certeza ante la salida del portero Máximo Banguera.
El ingreso de Holger Matamoros y Cristian Penilla en el segundo tiempo en poco mejoraron el accionar de los locales, que con el paso de los minutos ganaban en desesperación, más aún tras el replanteamiento de el estratega Armando Osma, que realizó variantes defensivas con el ingreso de Danny Tenorio y John Angulo.
En los últimos minutos, el ingreso del argentino Gonzalo Castillejos esperaba la mejora del ataque ‘Torero’, siendo pobre el aporte del delantero que no tuvo oportunidades de gol.
Un punto importante que suma Macará en su lucha por el no descenso ante Barcelona, que comienza cediendo puntos en condición de local y demostrando que tiene que buscar reemplazos para los jugadores que se fueron para la segunda etapa.