Gerard Piqué fue el protagonista del vuelo de Barcelona rumbo a Helsinki, capital del Finlandia, pero no por una buena causa. El defensa catalán, acostumbrado a hacer bromas en el camarín, esta vez se excedió: lanzó una bomba fétida en la parte trasera del avión.
De acuerdo al diario Sport, las azafatas reaccionaron con molestia pues justamente ellas trabajan en la zona posterior de la nave.
Por otro lado, el vuelo no era exclusivo de los jugadores de Barcelona. Por esta razón, las asistentes debieron ofrecer disculpas al resto de los pasajeros por el incidente, junto con rociar aerosol para intentar mitigar el mal olor.
A esta hora, Barcelona -con Claudio Bravo- ya se encuentra en Finlandia, país donde enfrentará este sábado al HJK Helsinki.
Fuente: La Tercera