El FC Grenchen tomó una medida sorprendente luego de perder 10-0 con los juveniles del Lucerna en duelo válido por la tercera división del Campeonato de Suiza.
Los once jugadores que participaron del encuentro fueron despedidos tras la derrota y se les comunicó que deberían vaciar inmediatamente los armarios que ocupan en el club.
El director deportivo Renato Brun defendió el hecho. «Suena brutal, pero estos jugadores no son lo suficientemente buenos para esta liga», aseguró a la prensa local.
El defensor Dedaj Dugagjin, uno de los afectados, se quejó por la decisión. «No han sido justos», dijo.
El Grenchen es último en el torneo de tercera división y la decisión de despedir a los futbolistas de la plantilla fue avalada hasta por los patrocinadores.
Fuente: El Comercio de Lima