Con el choque en marcha, a los 25 minutos, cuando el marcador registraba un 5-0, el portero pidió el cambio… y se fue a su casa porque una de sus vacas se había puesto de parto.
El equipo amateur francés, que ha perdido sus últimos 6 encuentros, en los que ha encajado la friolera de 69 goles y marcado un solo, afrontó su duelo contra el Tupigny con 14 bajas.
Esa plaga de ausencias hizo que el Marly-Gomont se desplazara con solo 12 futbolistas, entre ellos cuatro chavales de 17 años, que acabaron debutando con el primer equipo.
Ya con el choque en marcha, a los 25 minutos, cuando el marcador registraba un 5-0, el portero pidió el cambio… y se fue a su casa porque una de sus vacas se había puesto de parto y él, campesino de profesión, tenía que estar ahí.
Al no haber otro cancerbero disponible, se colocó bajo palos ¡el presidente Alain Braghéri, ¡de 61 años!, que había comenzado como jugador de campo en el once titular.
«Preferimos perder en el campo»
«No teníamos a nadie más disponible», alegó el directivo, a quien le metieron 15 tantos.
«Preferimos acudir a los partidos y perder sudando la camiseta antes que no presentarnos y hacerlo por forfait», aseguró Braghéri.
Fuente: Mundo Deportivo