Elrenador Sebastián Méndez renunció a su cargo al frente de Gimnasia y Esgrima de Jujuy tras ser amenazado por la barrabrava, tras perder frente a Juventud Unida de Gualeguaychú, por la vigésimo tercera fecha de la Primera B Nacional.
El conjunto jujeño está a 9 unidades del líder Patronato de Paraná, y por el momento tiene la expectativa de meterse en el Reducido para el segundo ascenso a Primera División.
«Los últimos meses fueron muy difíciles, con un robo en el medio a mi ayudante. Cuando se amenaza, no se hace, pero es una locura vivir así. Seguían las amenazas, insultos, era insostenible y no vale la pena quedarse en un lugar donde no te quieren», manifestó el DT a la prensa.
Méndez confirmó que recibió llamados extorsivos para que abandonara la provincia junto a su familia, debido a la mala campaña del «lobo».
El exdefensor de San Lorenzo y Vélez Sarsfield, agradeció no obstante el apoyo de los dirigentes del club, que incluso le colocaron seguridad cerca en su casa a modo de prevención.
«Esos que me amenazaron, lograron su objetivo, me voy triste y dolido de la provincia, pero esta situación, cruzó todos los límites de tolerancia», comentó Méndez en declaraciones a TyC Sports.
Méndez reconoció que «el equipo está bien», dado que se encuentra en zona de ascenso, pero agregó que «la violencia es cada vez mayor; siempre trabajé en el fútbol pero cuando pasan cierto punto y corre riesgo la integridad de tus hijos hay que poner un freno».
En ese sentido, dijo que «lamentablemente» está acostumbrado a este tipo de cosas porque hace mucho que está en el ambiente del fútbol, pero agregó que «cuando está en el medio la salud de la familia, no se puede aguantar».
La barrabrava jujeña está dividida en cuatro fracciones, siendo las más reconocidas «La Banda de la Flaca» y «Los Marginados».
«Yo deseaba continuar en Gimnasia, porque veía posibilidades de pelear por un ascenso, tenía fe en conseguirlo, pero no de esta manera, soy una persona, y no aguante más esta situación de violencia, que venía en escalada», señaló.
Méndez deslindó responsabilidades de la dirigente del «lobo», como así también a la gente jujeña, y reconoció que quería seguir pero debe irse «triste y decepcionado».
«Esto va a seguir sucediendo. Esto es nada con respecto al último Superclásico. Esto continúa y yo voy a seguir en el fútbol porque me gusta, pero hay que replantearse muchas cosas como sociedad», afirmó.
Fuente: Terra
