Los padres de Neymar, Neymar da Silva Santos y Nadine Gonçalves da Silva Santos, han hecho público un comunicado en el que no sólo niegan las acusaciones de un tribunal federal de Brasil, según el cual habría embargado bienes del jugador por valor 42 millones de euros, sino que defienden la absoluta transparencia fiscal del jugador del Barça, el escrupuloso pago de sus impuestos en su país y la correcta actuación financiera y fiscal de las empresa de los padres de Neymar aludidas en las informaciones publicadas en la prensa según las cuales habrían sido utilizadas para evadir impuestos.
De acuerdo a la noticia, el embargo cautelar fue una decisión tomada el pasado 11 de septiembre por el magistrado Carlos Muta,del Tribunal Federal de la Tercera Región y el fisco brasileño le demanda a Neymar el pago 14,6 millones de euros en concepto de impuestos no declarados entre los ejercicios fiscales de 2011 y 2013.
Esta misma información afirma que el tribunal ordenó el bloqueo del 150% de esa suma para asegurar el pago de los intereses y en concepto de multa por la supuesta evasión de los impuestos referentes a su traspaso del Santos al Barcelona. Debido a que el importe supera el 30% del patrimonio declarado de Neymar, que asciende 55 millones de euros, el tribunal decidió bloquear los bienes de su padre y las empresas familiares Neymar Sport e Marketing, N&N Consultoría y N&N Administração de Bens Participações e Investimentos.
Lo primero que la nota corrige es que Neymar Jr. no es socio ni tiene relación con ninguna de las empresas y por lo tanto no puede declarar lo que no ha ingresado. En relación a los impuestos, estas compañías han gestionado la carrera y la imagen del jugador desde hace 9 años habiendo declarado en Brasil siempre todos los ingresos derivados de los derechos de imagen. “Siempre hemos mantenido las actividades comerciales Brasil, incluso después de la salida del futbolista para jugar en España”.
Además de analizar técnicamente los cargos, afirma que en la liquidación de los impuestos “estas empresas pagan más de lo que emana de la obligación de tributar”. Para la representación oficial de Neymar el proceso se encuentra en estado embrionario y de hecho aún no se han tenido en cuenta los escritos de defensa administrativos que se basan en que los ingresos derivados de la cesión y explotación de la imagen de Neymar Jr. los puede cobrar una sociedad. “Nuestra empresa (Sport Neymar y Marketing S / S Ltda.) se creó en 2006, cuando el futbolista Neymar Jr. tenía sólo 14 años de edad”.
Por otro lado, “entendemos que son legítimos todos los contratos firmados por estas sociedades, cuyas ganancias han sido gravadas con regularidad”, aunque ignorados por el fisco en la evaluación del caso, lamenta la nota, insistiendo en que “todas, absolutamente todas, las transacciones financieras desde el extranjero se llevaron a cabo a través del Banco Central de Brasil, de acuerdo con los requisitos legales. No hay dinero en el extranjero ni sociedades en paraísos fiscales”.
Y puntualiza que por tratarse de un informe de hacienda de Brasil y que el procedimiento se encuentra en fase preparatoria el poder judicial todavía no puede comentar posibles errores ni excesos derivados de la inspección. “Todos nuestros activos, incluido el más valioso, la marca Neymar Jr. se encuentran en Brasil”, afirman los padres. “Creamos una institución benéfica –dice por último- a favor de más de 2.400 niños y sus familias. Todo ello con recursos propios, con la colaboración de socios y la voluntad de mejorar la carrera e imagen de Neymar. Hemos cumplido con nuestro deber y estamos seguros de que todo se aclarará a su debido tiempo”.
En definitiva, mientras en España la Agencia Tributria sostiene que ese dinero debe considerarse salario y tributar en España, el fisco brasileño acusa al jugador de evadir esos impuestos por presentarlo como beneficio industrial. Sorprende que la noticia haga estas referencias al jugador cuando la operación se realizó entre el FC Barcelona y una serie de sociedades en las que Neymar no es titular. Como apuntan los padres en su reacción sería el caso Neymar a la brasileña con ribetes también de una exagerada utilización de cifras y de consecuencias fiscales.
Fuente: Mundo Deportivo