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Más de dos meses después de anunciar su candidatura para la presidencia de la FIFA, Michel Platini todavía no presenta sus planes para reparar la reputación del organismo rector del fútbol. Y quizás nunca lo haga.
La reputación del candidato favorito para suceder a Joseph Blatter podría haber quedado maltrecha al ser involucrado en las investigaciones criminales sobre corrupción en la FIFA.
Y eso podría envalentonar a otros para presentar candidaturas para la elección de febrero, programada después que Blatter anunció que dejará el cargo.
La candidatura de Platini fue originalmente respaldada por el presidente de la Confederación Asiática de Fútbol, el jeque Salman Bin Ebrahim Al Khalifa, pero el bahreiní ahora es considerado como un posible retador.
Jerome Champagne, un ex subsecretario general de la FIFA, contempla sus alternativas luego de no conseguir el respaldo de cinco federaciones para presentar una candidatura en la votación de mayo que ganó Blatter.
El ex astro brasileño Zico y el ex capitán de la selección de Trinidad y Tobago, David Nakhid, están entre los ex jugadores que quieren tomar las riendas del organismo.
Además, el ex vicepresidente de la FIFA, príncipe Ali bin al-Hussein de Jordania, el único retador de Blatter en mayo, vuelve a aspirar al carago.
Chung Mong Joon, predecesor del príncipe Ali como vicepresidente asiático de la FIFA, también se candidateó, aunque el surcoreano podría verse afectado por una pesquisa de ética de la FIFA por donativos a federaciones.
El plazo para que los aspirantes presenten candidaturas a la FIFA es el 26 de octubre.
El supervisor electoral Domenico Scala podría haber rechazado la candidatura de Platini para entonces, si es que el comité de ética no ha impuesto una suspensión provisional al presidente de la UEFA, que ha pasado la última semana defendiendo su integridad.
Si Platini no retira su candidatura, y hasta ahora el ex futbolista francés no ha dado ningún indicio de que lo hará, los líderes que lo respaldan y que podrían tener ambiciones propias tendrían que arriesgar alianzas y amistades para aspirar al cargo. Y si Platini es declarado no apto después del 26 de octubre, sería muy tarde para que se presenten nuevos candidatos.
Platini espera que las autoridades suizas lo hayan exculpado para entonces, aunque el fiscal general Michael Lauber dijo el miércoles que la investigación va para largo.
“Todavía no he tomado una decisión”, indicó Lauber. “Estoy analizando todo lo que tengo”.
Platini fue interrogado por las autoridades suizas el viernes pasado por un pago de dos millones de francos suizos (unos dos millones de dólares) que recibió de la FIFA en 2011, por labores que realizó hasta 2002.
Platini dijo que sólo pidió el pago en 2011 porque, cuando aceptó el cargo como asesor de Blatter en 1998, la “situación financiera” de la FIFA no le hubiese permitido recibir el pago “total” de su salario. El caso podría girar en torno a lo que hay por escrito.
“Sé que este suceso podría afectar mi imagen y mi reputación”, escribió Platini a las 54 federaciones europeas.