Bélgica tiene todas las alarmas encendidas ante el altísimo riesgo de sufrir un atentado terrorista como el de hace una semana en París. La región de Bruselas elevaba este sábado a 4 (el máximo posible) el nivel de alerta terrorista. El resto de país, excepto la región de Vilvoorde, se mantiene la alerta 3.
Como consecuencia, el metro de Bruselas quedó cerrado al público. Fue una de las primeras medidas tomadas por el gobierno belga, pero no la única.
Hacia el medio día de este sábado, el Consejo Nacional de Seguridad de Bélgica decidió suspender también todos los partidos de fútbol de Primera y Segunda división de la región de Bruselas, alertados del alto riesgo que comportaba congregar a masas en los estadios de fútbol, dado el estado de emergencia que vive el país.
El Centro de Crisis belga había recomendado al Gobierno de Bruselas la anulación de los grandes acontecimientos previstos en el territorio y había recomendado también avisar a la población con el objetivo de que se eviten los lugares muy frecuentados.
El primer ministro belga, Charles Michel, explicó que las medidas responden a las informaciones que advierten del riesgo de un atentado por parte de «personas con armas y explosivos y, quizás, en diferentes lugares a la vez».
Esta semana las autoridades se veían obligadas a suspender también el amistoso entre Bélgica y España, ya alertados por el riesgo de un ataque.
Fuente: Diario Sport