«Di Santo te encontramos», dice en un escrito de puño y letra sobre una hoja del diario deportivo Olé la amenaza que recibió hoy Román Di Santo, el jefe de la Policía Federal, en su domicilio particular en un hecho vinculado a la investigación sobre posibles vínculos de agentes con la barra brava de Boca que lleva adelante un grupo del cuerpo de seguridad que encabeza.
La hoja sobre la que apareció el escrito contiene una entrevista a Luis «El Loco» Arrieta, el segundo de la barra «xeneize» durante la ausencia de Mauro Martín y de Maximiliano Mazzaro, en la que habla de la interna y de los negocios que manejan los violentos. La nota, titulada con un textual que dice «Me bajé para no terminar en un ataúd», recoge en un pasaje la afirmación de Arrieta de que «si la Justicia dice que la barra es una asociación ilícita, será así».
En este contexto parece encuadrarse la amenaza en la que además del escrito mencionado aparece subrayada la palabra «ataúd», a partir de la investigación impulsada por el propio Di Santo a través del juez Manuel de Campo sobre la sospecha de connivencia entre barras y dirigentes de Boca, además de policías de espectáculos deportivos que ya fueron desplazados de sus cargos, con algún sector de la Policía Federal que permitía los negociados a partir del tráfico de carnets apócrifos.
El comisario general concurrió hoy hasta tribunales para presentar la amenaza ante el juez De Campos, encargado además de la investigación del tiroteo entre las facciones de la barra brava de Boca en las inmediaciones del estadio San Lorenzo.
Fuentes de la investigación comentaron a Infobae que no descartan «ninguna hipótesis» dado que Di Santo removió la cúpula de comisarías, como la 24 o de la división «Eventos», hasta que se aclare las denuncias por posible «negligencia» o «connivencia» del personal policial con los barras.
A la salida de los tribunales, el jefe de la Policía Federal aseguró que «a medida que avanzamos sobre delitos organizados hay gente que se pone muy nerviosa porque estamos llegando al fin y pasan estas cosas. La secretaría de seguridad recibe estas amenazas todos los días».
Además aclaró que «tengo directivas precisas del gobierno nacional de trabajar en estos hechos. Como dijo Berni, vamos esclareciendo hechos y le está tocando mucho a los barras en este hecho puntual. El juez me tomó la denuncia y va a actuar en consecuencia».
Respecto de los cambios en su forma de vida tras las amenazas, expresó que «yo nunca cambié mi domicilio, vivo en el barrio que nací. Mi forma de vida no cambió por ser jefe de la Policía Federal. Conocen puntualmente cuál es mi casa, porque casi nací a 10 cuadras de ahí. No hablé con la dirigencia. Voy a seguir trabajando. Como policía y autoridad no me asusta en absoluto. Estoy preparado para eso».
Fuente: Infobae