EFE
El Manchester City, gracias a un tanto del belga Kevin De Bruyne, derrotó este martes en el Etihad Stadium al París Saint-Germain (1-0) y certificó por primera vez en su historia su presencia entre los cuatro mejores equipos de Europa.
El conjunto inglés hizo bueno el 2-2 que se llevó hace seis días de París y, en un partido muy serio, en el que incluso falló un penal, se aprovechó de un nervioso PSG que no pareció entrar en ningún momento en el partido.
Manuel Pellegrini decidió no alterar lo que le funcionó en la capital francesa y apostó por los mismos 11 hombres que sacaron el valioso empate del Parque de los Príncipes.
Los brasileños Fernando y Fernandinho, dos de los protagonistas entonces -uno regaló un gol a Ibra y el otro anotó el segundo del City-, ocuparon el centro del campo, dejando a Yaya Touré, uno de los emblemas del multimillonario proyecto inglés, en el banquillo.
Enfrente, un PSG que, tras su inversión multimillonaria en los últimos años, ansiaba hacer historia e igualar las semifinales de la temporada 1995/1995.
Sorprendió Laurent Blanc con su once, dejando de lado su habitual 4-3-3 para optar, ante las ausencias de Blaise Matuidi y David Luiz, por un 3-4-1-2.
La baja de ambos jugadores, que cumplieron una sanción, hizo que el técnico francés se decantara por Aurier, Thiago Silva y Marquinhos en el centro de la zaga, con Van der Wiel y Maxwell de carrileros y Thiago Motta y Rabiot en el mediocampo.
El empate a cero le valía, pero el City salió, tal y como había prometido su entrenador, buscando el tanto que allanara el pase a semifinales. El PSG, por contra, parecía agarrotado, buscando en exceso a un Di María que hacía lo posible por moverse entre líneas ante el férreo marcaje de Fernando y Fernandinho.
La única ocasión de los visitantes en la primera mitad la tuvo Ibrahimovic en sus botas con un tiro libre desde unos 30 metros que Hart desvió a saque de esquina con una gran acrobacia.
A partir de ese momento el encuentro fue un monólogo de los de azul, con un “Kun” Agüero extramotivado que no paraba de incordiar a la dubitativa defensa de tres plantada por Blanc.
En el minuto 23, el “Kun” tuvo una doble oportunidad, primero tras un buen pase en profundidad de De Bruyne y luego después de un error de Zlatan en la entrega, pero ambos disparos se marcharon ligeramente desviados.
No despertaba el aletargado PSG y lo sabía que el City, que empezó a presionar la salida del balón. Y así llegó la mejor ocasión de los ingleses, cuando, en el minuto 28, tras un fallo de Aurier, Agüero se plantó solo y fue derribado dentro del área por Trapp.
El árbitro, el español Velasco Carballo, decretó la pena máxima, pero perdonó la roja al meta alemán. Sin embargo, el “Kun” no aprovechó la ocasión y su lanzamiento desde los once metros se fue fuera por centímetros ante la alegría de un aliviado Trapp.
La lesión, minutos antes del descanso, de Motta acabó con el experimento de Blanc, que regresó a su tradicional defensa de cuatro, subiendo a Marquinos al centro del campo.
Mejoraron en la segunda mitad los visitantes, que pudieron adelantarse en el marcador, primero tras una falta cobrada por Ibra y después con una internada de Lucas, pero ambas ocasiones las desbarató un seguro Hart.
Sabiéndose eliminado, el PSG se fue al ataque buscando el gol que lo metiera en ‘semis’ y comenzó a embotellar al City, sujetado por el buen hacer de su defensa y por los aciertos su arquero.
Hart acudió al rescate nuevamente el 66, cuando consiguió desviar milagrosamente a saque de esquina un remate de cabeza desde dentro del área de Thiago Silva tras un córner de Lucas.
Resistieron los locales las acometidas rivales y comenzaron a soltarse en ataque. Tocaban y tocaban en el campo del PSG Agüero, Silva, Navas y De Bruye hasta que en el minuto 75 llegó el 1-0.
El ataque paciente del City dio sus frutos después de que, tras una buena internada de Clichy por la izquierda, el balón le quedara franco a De Bruyne, que con un disparo cruzado y ajustado al palo izquierdo superó a Trapp.
Necesitaba dos goles el PSG, que vio incluso como el árbitro anulaba un tanto a un desesperado Ibrahimovic. Pese a las acometidas, el marcador no se volvió a mover y Pellegrini y su City celebraron un pase a semifinales que da, sin ninguna duda, un fuerte empujón al proyecto millonario de los ingleses.