El mediocampista ecuatoriano terminó siendo figura en el final de la Liga de Rusia, anotando un gol en la victoria del Rostov ante el Terek en condición de visitante por el marcador de 2-0, pese a lo cual no le alcanzó para ser campeón, celebrando igual el subtítulo en este país.
Se jugaba a horario unificado este encuentro, junto al del CSKA Moscú ante el Rubin Kazan (que terminó ganando en condición de visitante por 1-0 y sentenciando su título), con la vista puesta en el otro encuentro y el Rostov supo estar a la altura al buscar siempre el arco rival.
A los 29 minutos, una desconcentración de la defensa del Terek le dejó el balón servido a Noboa, quien con un potente remate definió de gran manera para abrir el marcador a favor de la visita.
Para sentenciar el encuentro, ya en el segundo tiempo, Erokhin llegó al segundo tanto para el Rostov, que con esta victoria marcó el final de una gran temporada, donde obtuvo el segundo lugar y clasificó históricamente a su primera Champions League.