La situación económica de varios clubes en el fútbol ecuatoriano es crítica, en una realidad que ha complicado a varias instituciones, algunas que le quieren huir al destino final que tuvo Deportivo Quito, club que terminó descendiendo a Segunda División al ser suspendido por la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) por deudas.
Uno de estos equipos que pasan por un duro momento en la Serie B es Liga de Loja, institución que el año pasado ya presentó inconvenientes en el plano económico, lo que lo llevó a perder la categoría en la A de Ecuador y ahora su situación no ha mejorado.
En esta temporada ha sido una constante el retraso en los pagos de sueldos y las amonestaciones en la FEF, que son levantadas de última hora para poder jugar cada fin de semana, además de darse un fenómeno particular por la pobre capacidad económica que presentan.
Ha sido uno de los constantes problemas de Liga de Loja no poder cancelar a tiempo a los árbitros en sus encuentros de local, por lo que ha estado cerca de perder puntos por no jugarse el encuentro, lo que ya sucedió una vez en esta temporada, pero por huelga de sus jugadores.
Ahora, tras la renuncia de Jaime Villavicencio a la presidencia de este club, Robert Ludueña ha asumido este cargo, el mismo que por el momento ha logrado darle un respiro en la FEF a este club, tras lograr un plazo mayor para pagar una deuda que tienen con Pedro Larrea y que podría dejarlos suspendidos por la FEF, lo que le significaría la misma suerte de Deportivo Quito.