Nuevo episodio vergonzoso en el fútbol inglés. 20 personas fueron detenidas y tres policías necesitaron atención médica durante el derbi entre Bristol City y Bristol Rovers, que terminó con victoria para los ‘citizens’ (2-1). Los dos equipos, a pesar de jugar en distintas divisiones, se enfrentaban por primera vez en siete años en el trofeo Johnstone Paint.
En cuanto el árbitro pitó el final del encuentro, una multitud de aficionados del Bristol City saltaron al campo con el objetivo de alcanzar a los hinchas del Bristol Rovers, quienes estaban situados en otras zonas del campo.
Ante la invasión, la policía entró en el terreno de juego montada a caballo con el objetivo de dispersar a los aficionados del Bristol City. Fuera del estadio, las peleas se sucedieron a lo largo del aparcamiento cuando los ‘hooligans’ del Rovers se saltaron el control policial y comenzaron a enfrentarse con los hinchas del City.
Fuente: elmundo.es