Un preocupante momento se vivió en un encuentro por el fútbol de Noruega donde un jugador terminó muy mal herido tras un choque con el guardameta rival en un ataque, teniendo como resultado una fuerte lesión que le comprometió una de sus piernas e impactó a todos en el campo de juego.
Todo se dio en un ataque de uno de los equipos donde el delantero a velocidad intentó dejar al portero rival, pero con tanta mala suerte que el guardameta terminó chocándolo por lo bajo y dejándole la pierna mal ubicada, que terminó con una fractura de tibia y peroné, y con la misma prácticamente colgando.
Tras la jugada, el árbitro expulsó al guardameta, el mismo que no pudo ocultar su turbamiento por el resultado que le había causado a su rival, siendo atendido el delantero de manera urgente por los médicos y retirándose del campo de juego en medio del dolor por la lesión.