Brasil ha escrito una de las páginas más negras y dolorosas de su historia en el fútbol, perdiendo de manera humillante la semifinal ante Alemania por el marcador de 7-1, en el desde ya denominado ‘Mineirazo’.
Fue un baile con todas las letras para Alemania, que desnudó todas las falencias que se habían denunciado de un débil ‘Scratch’ que durante el Mundial no había terminado de convencer, pese a clasificar hasta instancias finales, y con muchos goles y gran juego sembró el dolor y las lágrimas en la hinchada brasileña.
Tras un tibio inicio de Brasil, donde intentó ser protagonista, vino el vendaval alemán, que en el primer tiempo definió y sentenció sin misericordia a los anfitriones. La ruta de la victoria la abriría Thomas Muller cuando apenas se jugaban 10 minutos.
Para tomarse récords, el histórico goleador Miroslav Klose llegó a la segunda, que le dio su tanto 16 en la historia de los Mundiales, rompiendo el récord que mantenía el delantero brasileño Ronaldo.
Dos tantos de Kroos y uno más de Khedira dieron un claso y sentenciante 5-0 en el primer tiempo, que encontraba fácilmente la victoria para los alemanes y sentenciaba el partido.
La segunda mitad, bajando el ritmo pero no renunciando al ataque, logró dos tantos más por medio de Schurrle, que ingresó al cambio y terminó por sentenciar una historia que será recordado por muchos, el día en que Brasil perdió en su casa por 7-0, el día del «Mineirazo».
Sobre el final, Oscar puso la del descuento de Brasil
Alemania ahora espera rival para la final, que saldrá de entre Argentina y Holanda.