Las críticas a Yuichi Nishimura, árbitro japonés que dirigió el partido inaugural del Mundial entre Brasil y Croacia, fueron masivas, tanto que tuvo que disfrazarse los días posteriores al encuentro para huir la ira croata.
El eje de la polémica fue un penalti inexistente que pitó al delantero brasileño Fred, cuando éste se giraba para intentar un remate imposible en el interior del área.
La pena máxima condicionó por completo un partido que iba empatado y que la selección croata tenía posibilidades de ganar. Pues bien, el propio Nishimura ha reconocido que tuvo que ir disfrazado por la ira de los aficionados croatas. «Tuve que ir protegido con seguridad. Sucedieron algunos incidentes pero nada serio», explicó el árbitro japonés.
Además, afirmó que el penalti que pitó esta bien señalado: «Estaba preparado para recibir críticas desde que entré en el campo ya que es parte del trabajo. El delantero estaba intentando girarse para chutar y el defensa colocó las manos sobre él».
Fuente: Diario Sport