El atacante argentino de River Plate Lucas Boyé pasó un mal momento al volver a Buenos Aires tras el encuentro de Copa Libertadores ante Tigres. Perder la visa le costó quedarse en el Aeropuerto de Monterrey y perder el vuelo.
Tras pagar una multa por el extravío, Boyé se alistaba a abordar el avión, pero el vuelo ya estaba cerrado y debió permanecer en tierras mexicanas. Recién pudo retornar el viernes en la noche.
El caso es curioso, puesto que Boyé, de 19 años, ni siquiera salió en el banco de suplentes en el empate 2-2 entre su equipo y Tigres.
Fuente: El Bocón