En el Congreso Ordinario de la FEF, el directivo de Universidad Católica, Miguel Almeida, realizó la propuesta de suspender definitivamente a Luis Ch. de sus funciones en este organismo y no momentáneamente mientras dure el proceso de investigación legal que lo tiene con arresto domiciliario.
La idea de Almeida era poner a votación la decisión de suspender a Luis Ch. debido a que el proceso judicial que vive por supuesto lavado de activos podría prolongarse su ausencia de la FEF.
Pero, tras la ponencia de Luis Fernández, presidente de la Asociación de Manabí, quien pidió desestimar este pedido, el síndico de la FEF, Guillermo Santos Guale, desestimó el pedido, no procediendo a la votación.
Luego de esta decisión, Patricio Torres, representante de Liga de Quito, volvió a pedir la votación, la misma que finalmente no procedió, manteniéndose la licencia de 90 días que tiene Luis Ch. de la presidencia de la FEF.
Tras otras ponencias, Fernández volvió a pedir la palabra, llegando a comparar las medidas contra Luis Ch. con el juzgamiento que sufrió Jesucristo según la biblia.
Luis Ch. pidió licencia de 90 días por las investigaciones judiciales que vive, afirmando según su abogada su regreso a la presidencia de la FEF en caso de ser absuelto de los cargos contra él.