La historia del delantero holandés Van Wolfswinkel es de admirar. Pudo volver a vestir de corto luego de estar al borde de la muerte hace un año y ahora cuenta lo que vivió, qué significó para él este regreso y cómo superar los momentos duros que tuvo que pasar tras sufrir una conmoción cerebral.
En una entrevista para la BBC, Wolfswinkel contó cómo fueron los momentos posteriores a ese encuentro entre Basilea y el Lask, en la previa de la Champions League, cuando sufriría la conmoción cerebral que por poco le cuesta la vida y la que le impidió estar en las canchas por más de seis meses.
“Fue aterrador. No esperas algo como esto. Normalmente, con las lesiones, conoces el plazo y trabajas duro todos los días para progresar, pero con esto no tienes idea de qué es o del peligro que conlleva. Fueron un par de días difíciles en el hospital”, manifestó.
“No pude jugar durante seis meses. No podía entrenar, no podía hacer nada. El primer día tras salir del hospital, compré flores para pedir disculpas a mi esposa por los próximos meses, porque sabía que estaría de mal humor. Hubo encuentros a los que fui y después de 20 minutos le decía a mi esposa que me tengo que ir, que no podía verlo”, sumó.
Wolfswinkel pudo volver a las canchas en febrero, jugando unos minutos con el Basilea por la Liga de Suiza antes de la suspensión del fútbol por la pandemia del coronavirus.