Durante una final los que más sufren son los hinchas en las gradas. En el partido entre Atlético Mineiro y Olimpia no fue la excepción.
La fanaticada brasileña vivió con mucho suspenso los primeros 45 minutos de la gran final de la Copa Libertadores.
 
						
									

















 
								
				
				
			 
				 
				 
				 
				 
				 
				