El volante argentino Damián Díaz habló tras los incidentes que provocaron su expulsión en el partido de Barcelona ante Deportivo Cuenca y su posterior sanción de cuatro fechas, afirmando que no se dieron todas las cosas que se escribió en el informe del árbitro Carlos Orbe.
Díaz, en conferencia de prensa tras el entrenamiento de Barcelona, indicó que si bien es muy efusivo a la hora de actuar en el campo de juego, no lo hace de mala fe y negó el incidente que provocó su expulsión en el pasado partido.
«Me dolió un poco la manera en la que se trató el tema, si bien hay cosas que debo corregir como ser humano, se tomaron muchas cosas de una manera incorrecta. De lo que se dice en el informe, yo discuto y hablo con los árbitros pero siempre con respeto, antes de este partido el último partido que me había perdido era por cinco amarillas, en el caso de la expulsión jamás le lancé un beso a nadie, a lo mejor el árbitro pensó que era así, por eso le fue a pedir una explicación», manifestó.
«Demoré en salir y luego pasó lo del línea, si a mí insultan a mi madre también voy a reaccionar, pero no soy nadie para decir qué pasó, en lo de los insultos racistas no hay lugar, tengo muchos amigos de color con los que me llevo muy bien, esos temas son extrafutbolísticos, molestan un poco, yo nunca traté de ofender a nadie», sumó.
Finalmente, el argentino indicó que estas cosas no le harán que siga en firme con los objetivos de Barcelona y con su carrera en el país, en el que cumple su cuarto año.
«Estamos en un equipo que genera muchas emociones, el árbitro lo interpreta de otra manera, los errores los puede tener cualquier ser humano, si me equivoqué voy a tratar de cambiar pero yo jamás quise ofender a nadie, amo a este país, me han brindado lo mejor, con este tema no me van a correr», finalizó.